Tanto insistieron los fanáticos de Damien Mercier, que a los dueños no les quedó más que hacerles caso y abrir una tienda en La Dehesa. Amplia y bien iluminada, al centro tiene una mesa de mármol de Alaska donde se exhiben las 70 variedades de bombones que tiene esta chocolatería y que se hacen de manera totalmente artesanal; incluso algunos los pintan a mano. La arquitectura interior estuvo a cargo de Martín Honorato, quien no dudó en usar las icónicas caja de macarrones de la marca para decorar uno de los muros, como si de ladrillos se tratara. Mall Vivo Los Trapenses, local 1076, Lo Barnechea.