Lo que uno pueda decir sobre México, su comida, cine, arquitectura, cultura, belleza y un largo etcétera es poco. Basta decir que son más de 60 los pueblos originarios que hoy componen esta mezcla colorida, alegre y llena de energía, por lo que resulta natural que su arte y arquitectura hayan sido de una potencia histórica y reconocida en el mundo entero. Pues bien, hace ya varios años, su diseño se eleva y se posiciona en un sitial de lo mejor. Un recorrido rápido por CDMX y sus spots de moda (La Condesa, La Roma o Polanco) o incluso otras ciudades como la hermosa y colonial San Miguel de Allende, que es un hervidero de creatividad, otorgarán rápidamente una idea de aquello que hoy se exporta: el estilo mexicano.
Galerías como Galería Mexicana de Diseño (@g_mexicana) o la más nueva Originario (@originario.originario) reúnen las muchísimas formas de diseño y el trabajo que tiene como común denominador ese componente que nutre las sangres del arte mexicano, el color de sus tierras, de sus artesanías y de los múltiples saberes y sabores. Allí se pueden encontrar por ejemplo el talento de Daniel Valero y Mestiz (@mestizmx) o de Norberto Miranda y su proyecto Bolson (@bolsasbolson) que juega con lo más contemporáneo y la idea de que el plástico es también ancestral.
Así se desarrollan dos vertientes: una que tiene que ver con la reinterpretación de lo tradicional y/o originario, sumado al rescate de muchísimas técnicas diversas aplicadas a una mirada experimental que gana en estilo e identidad. Por otro lado, una línea que se juega por los nuevos materiales y la sustentabilidad. Ambas se encuentran en el componente de responsabilidad social, ya sea por relevar aquella riquísima cultura prehispánica y a sus cultores o bien, por tener más presente que nunca que vivimos en una crisis climática y el tiempo y los recursos son más que escasos.
Norberto Miranda
“Veo en el diseño mexicano una nueva exploración en la identidad. Ya no necesariamente prehispánica, ya más conciliada con el proceso de mestizaje y en constante conflicto con la identidad moderna mexicana”, asegura Norberto Miranda (@norbeister), artista y diseñador originario de Guadalajara. Norberto trabaja desde arquitectura efímera a objetos de uso cotidiano con plásticos reciclados. En un viaje a Cihuatlán, Jalisco, esperaba recuperar plástico de inflables, pero se encontró con otro tipo de material: un plástico con el que los productores de plátano de la región cubren la cosecha. Con éste, Norberto crea un material laminado que es base para casi todos sus objetos. “Luego damos acabados con plásticos más industriales o de origen urbano. Cada localidad tiene su desecho, y eso le da un componente muy arqueológico, antropológico, que juega un papel narrativo relevante en los productos”. Su primer experimento fue una bolsa, y al seguir en esta línea nació Bolsón, la marca con la que vende estos objetos.
“El plástico es ancestral. Y revive en cada uso que le damos. Encuentro en el plástico una cualidad arqueológica que lo dota de cierta espiritualidad. Ya de por sí el material es ancestral, pues proviene en parte de los restos orgánicos de antiguos habitantes de la Tierra (…) Creo que el plástico merece más y que la etiqueta “desechable” es una idea nociva que me cuesta mucho arrancar de mi mente. En este proyecto he aprendido a querer al plástico, lavarlo y repararlo; buscarle otro propósito que no sea yacer por ahí. Dedico mi tiempo para corregir con esmero y convertirlo en algo nuevo, de nuevo y de nuevo”, reflexiona Norberto.
RAIZ MX Barro Mexicano
Fundado en 2018 por Thalía Velasco y Walther Santiago, Raíz Mx (@raiz__mx) es un taller de diseño y producción que rescata y une la historia de la alfarería, una de las técnicas artesanales mexicanas más representativas. “Buscamos presentar una faceta distinta a la convencional del trabajo que puede llegar a realizarse con este material, respetando la esencia de los procesos artesanales tradicionales y explorando en cada etapa de producción, desde la concepción del diseño, la selección y mezclas del material hasta los diversos tipos de acabados finales que puede tener cada pieza, mejorando la calidad y apariencia de cada una, capaces de mostrar de manera tangible la materialización de nuestras raíces y su capacidad de contener el tiempo y sus transformaciones en cada una de sus líneas de expresión”.
Trabajan con diversos talleres que abrieron sus puertas para conocer de forma más profunda y directa las técnicas y el trabajo de cada uno. “Cada una de las técnicas que se utilizan para producir cada pieza de Raíz involucra un acervo cultural arraigado y construido de forma colectiva por un equipo de artesanos y diseñadores que hemos buscado combinar el equilibrio entre la tradición y la innovación, lo cual hace que la pieza final sea una pequeña muestra de la transformación de cada técnica y el trabajo de muchos artesanos”.
Daniel Couttolenc
El diseñador industrial Daniel Couttolenc (@danielcouttolenc) se define por la búsqueda de “armonía” usando la proporción áurea como plantilla. Su quehacer comprende desde el diseño de autos y el diseño arquitectónico, hasta la fotografía, el diseño de mobiliario y el diseño de interiores, siendo estos dos últimos su enfoque principal y donde la idea de la “Geometría Sagrada”, también conocida como “Geometría Natural”, es el lugar donde Daniel encuentra una forma de unir lo visible con lo invisible, viajando siempre al origen, sea de los elementos, materiales y de la cultura mexicana.
Baron & Vicario
Fundado por el diseñador Raúl de la Cerda, Baron & Vicario (@baronyvicario) nace a partir de la necesidad de impulsar y fortalecer mediante el diseño, a pequeños talleres mexicanos. Desde una concepción contemporánea y actual, Raúl genera nuevas propuestas de productos y objetos, sin olvidar su identidad, su contexto y la esencia de cada proyecto. “Lo más importante de crear una pieza, son las manos que con dedicación y compromiso trabajan para crearlas. Cada una pasa por muchas manos y esto le otorga a cada pieza la calidad y el acabado perfecto que la vuelven única”.
NÁAY significa “soñar” en náhuatl, soñar con llevar más allá, y ese es el nombre de la última colección de Baron & Vicario, pues el diseñador sueña con llevar más allá de sus fronteras el orgullo de ser mexicanos.
“Nuestra nueva colección es un elogio a las formas, creaciones y sentidos; desde su origen, un tributo a nuestras raíces y orígenes esenciales, en donde el principal objetivo es representar y proyectar a México con orgullo, en evolución, en formas y pensamiento. Representando su cosmología antigua e intentando transmitir con sus materiales, un poco de ese sueño original, que es llevar un trozo de México al mundo. Pero sin perder de vista que para ser únicos formamos parte de una gran cultura que se forja desde la manera más esencial, unificando rasgos prehispánicos en contraposición y semejanza a la vez, con los rasgos de la cultura griega, una cultura que hoy nos comparte también ciertas características y cierta pertenencia, a pesar de la atemporalidad”.