Viajes

Viajar, trabajar y vivir en comunidad: la tendencia de los colivings (y 8 que tienes que conocer)

De Chile a México o Italia. Alojamientos con encanto donde se puede trabajar y viajar con todas las comodidades.

Quien haya viajado solo sabrá que hacerlo es sinónimo de abrir la mirada, cambiar la mente, conocerse mejor y disfrutar de paisajes únicos. Disfrutar de la tranquilidad de un bosque, de una taza de café en el centro ajetreado de una ciudad, de un mirador con buenas panorámicas, o de las palabras amables del señor que, con paciencia, ayuda a entender el idioma del país en el que nos encontramos, siempre son buenos escenarios. Pero cuando la estadía se alarga, puede también llegar la soledad. Y esa es precisamente una de las razones por las que cada vez existen más colivings alrededor del mundo.

Los colivings son modelos residenciales con interiorismos increíbles que combinan en un solo lugar espacio para viviendas y otros comunes de trabajo y ocio; una especie de residencia universitaria para adultos donde no sentirse nunca solo, pero gozar al mismo tiempo de un espacio individual al que retirarse cada vez que el cuerpo lo pide. 

Comenzaron hace más de diez años a despuntar en Silicon Valley cuando, ante la falta de viviendas, muchos trabajadores buscaron espacios compartidos para vivir y aprovechar para hacer networking. Después se expandieron por el mundo y, desde 2019, su mercado crece alrededor de un 30% cada año. No sorprende, pues poco menos de la mitad de los países del mundo ya ofrecen visados para nómadas digitales. En definitiva, el workcation está de moda. 

Pero esta tendencia no tiene que ver solo con los nómades digitales, sino también con el alto precio de las viviendas, que han transformado el vivir colectivo en una opción atractiva sobre todo para los más jóvenes.

Aquí, un recorrido por algunos de los colivings ideales para unirse a esta tendencia, desde el sur de Chile hasta Indonesia

 

Pichi

Basta con ver una sola imagen de Pichi para querer pasar una temporada en su interior y darse cuenta de cuáles son los valores de sus propietarios. Aunque en Chile hay algunos colivings urbanos, este es uno de los que más merece la pena conocer: un complejo de casas pequeñas en la región de Los Lagos.

Ubicado entre bosques verdes y rodeado de fauna nativa, parece una parada indispensable para todos los que quieran conocer el sur y la Patagonia chilena, pero también para los que quieran experimentar destinos naturales respetando el medio ambiente de manera consciente. 

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Sus casas pequeñas han sido diseñadas para maximizar el espacio y la eficiencia mediante el uso de materiales biodegradables como la madera, material que además también es el que protagoniza sus pasarelas, instaladas para proteger el suelo y ayudar a la preservación del ecosistema.

Pichi partió en 2022, cuando el arquitecto Juan Marín y la diseñadora Pamela Villamar se unieron para crear un concepto único en la comuna de Calbuco. Buscaban simplicidad y belleza natural, y lo lograron en este alojamiento rural. 

En Pichi cada visitante elige cómo quiere vivir la experiencia: hospedándose unos días y disfrutando de un ritmo de vida slow en plena naturaleza, o escogiendo sus estadías largas o la opción de coliving, es decir, viviendo allí una temporada y disfrutando de las maravillas de su paisaje e instalaciones, una manera de trabajar desde sus estancias con las maravillas que ofrecen sus alrededores, como las rutas de senderismo o los deportes acuáticos en la Laguna Troya.

En Instagram, @pichi.cl

 

Nomad Home

Al otro lado del charco se encuentra Nomad Home. Es más que un espacio de coworking para trabajadores remotos y emprendedores: es un refugio lujoso diseñado para aquellos que desean fusionar el trabajo con experiencias gastronómicas y culturales únicas; un lugar de oficinas compartidas ubicadas en ambientes de lujo, rodeados de historia y belleza arquitectónica. La sorpresa aparece cuando cae la noche, momento en el que también actúa como espacio idóneo para los amantes de la gastronomía

El proyecto fue idea de Kella, quien, inspirada por su pasión por la comida y los viajes, creó Nomad Home. En este espacio se puede disfrutar de experiencias culinarias de primer nivel, gracias a asociaciones que realiza con chefs galardonados con estrellas Michelin y algunos de los mejores sommeliers del mundo. Ya sea una cata de vinos en la región de Burdeos, una cena con menú degustación, o una clase privada de cocina con un chef premiado, Nomad Home eleva la experiencia del trabajo remoto a un nivel completamente nuevo.

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Siempre se reinventa, y este año, por ejemplo, Nomad Home organiza retiros exclusivos de 3 o 7 noches en lugares impresionantes de Europa. En Périgord Vert, Francia, los huéspedes se alojan en un castillo del siglo XIX, restaurado con elegancia, con jardines privados y una piscina climatizada. En la Toscana italiana, el Relais & Châteaux Resort Il Falconiere, de cinco estrellas, brinda un entorno espectacular con vistas a la bodega Baracchi y dos piscinas panorámicas. Finalmente, en otra zona de Italia, concretamente en Umbría, los huéspedes se alojarán en una villa rústica construida sobre una colina, con vistas panorámicas y un entorno natural protegido.

Cada retiro es cuidadosamente diseñado para brindar a los huéspedes una experiencia inolvidable; una elección ideal para quienes buscan algo más que un simple lugar para trabajar.

En Instagram, @nomadhome_co

 

The Offsite

Esta filosofía de colivings pop-up, es decir, temporales, es la misma que comparte también The Offsite. Todo comenzó en otoño de 2020, cuando Lavinia, después de trabajar desde casa durante la pandemia, pensó en aprovechar esta oportunidad de trabajo en remoto para hacerlo de una manera diferente. “Pensé que trabajar desde casa, no tenía que ser necesariamente trabajar desde casa. Aproveché esta oportunidad para organizar una workcation [mezcla de work (trabajo) y vacation (vacación)] de dos semanas en Lisboa para trabajadores remotos. Este viaje terminó extendiéndose debido a su éxito y finalmente nos quedamos cinco semanas. A todos nos encantó vivir esta experiencia de coliving, y fue entonces cuando nos dimos cuenta de que éramos todos más productivos teletrabajando”. 

Conocer gente nueva, hacer contactos y probar experiencias que nunca antes había vivido desde un clima cálido y moviéndose por lugares impresionantes, fueron algunos de los otros factores que le llevaron a  fundar The Offsite. Ahora, entre sus próximos destinos se encuentran Marruecos o Fuerteventura, donde piensa hospedarse junto a sus compañeros en villas que reúnan los requisitos que siempre busca antes de organizar cualquiera de estas estancias: “buena ubicación y reseñas, alta velocidad de Internet o una óptima relación entre la cantidad de habitaciones y baños que necesitan”.

En Instagram, @the.offsite

 

Citylifer

Redefinir las largas estancias de los teletrabajadores en las ciudades es el propósito bajo el que nació The Citylifer, en Rotterdam. Con visión de expandirse y situarse en el corazón de las ciudades más cool de Europa, surgió como respuesta a una carencia en el mercado habitacional, ofreciendo una propuesta inédita que satisface las necesidades de jóvenes adultos y nómadas contemporáneos que desean vivir con estilo y comodidad, en compañía de una comunidad afín. 

Citylifer tiene habitaciones amplias y privadas totalmente equipadas, junto con espacios compartidos diseñados para fomentar la interacción social y la creación de vínculos duraderos. 

Tienen varias opciones: desde alojamientos para grupos de dos a cinco amigos, hasta las innovadoras Citylifer Houses, diseñadas para albergar hasta 50 personas, y los Citylifer Buildings, edificios adaptados para comunidades de más de 50 residentes

En Instagram, @thecityliferrotterdam

 

The Outsite

Este coliving, con sedes en Europa, Asia y América, es  uno de los más famosos, y no es algo que extrañe, ya que cuenta con todos los atributos para querer reservar una estadía. Se encuentra tanto en entornos costeros y montañosos, como cerca del mar. Dependiendo del lugar escogido, su decoración varía y se adapta al país y al ambiente de la ciudad, aunque un aspecto es siempre común en cada uno de sus edificios: las estancias espaciosas y abiertas, ya sean apartamentos, estudios o habitaciones privadas

Parte del valor añadido de Outsite, más allá de una clara apuesta por el diseño neutro, es su compromiso con la sostenibilidad, ya que realiza donaciones benéficas y planta un árbol por cada reserva realizada en sus ubicaciones en California, Indonesia, México y España.

Además, organiza numerosos eventos y actividades para que todos sus residentes pueden intercambiar ideas y conocerse, e incluso para aquellos que tan solo contratan servicio de visita en su Outside Cowork café, un espacio de trabajo al que puede acudir cualquier persona que no viva en coliving y pague una tarifa para disfrutar de varios escritorios, comida, y café. Ideal para trabajar, hacer networking, y, por supuesto, entablar amistad. 

En Instagram, @outsiteco

 

CoVive

México puede presumir de albergar espacios como CoVive. Comenzó hace más de cinco años como vivienda para personas que se trasladan a México, para, en palabra de sus fundadores, “celebrar la esencia humana de compartir, alentando a las personas a elegir la vida compartida no por necesidad, sino como una decisión consciente por los beneficios que ofrece”. 

Bajo este propósito de crear comunidad, CoVive cuenta con un interiorismo que favorece ese objetivo. “Nos apasiona crear residencias, pero también comunidades prósperas donde la colaboración y la camaradería florezcan”, cuentan desde la compañía. 

Cocinas espaciosas, terrazas muy amplias pensadas para brunches, mesas de ping pong, habitaciones para practicar yoga o cualquier actividad deseada, son su marca. “Nuestras áreas comunes están estratégicamente ubicadas para fomentar la interacción entre los residentes, siendo la sala de estar, la cocina y el comedor el corazón de nuestros proyectos. Priorizamos diseños abiertos y espaciosos para facilitar las reuniones y los momentos compartidos”.

En Instagram, @covivemx

 

Yon Living

Como casi todas las mejores historias, la de Yon Living comenzó de un momento inesperado. Semanas después del confinamiento, Tom Brooks y Ant Steele fueron invitados a dormir, quedarse y trabajar en un espectacular castillo francés del siglo XVII, el Chateau Naudou, en Agen, rodeado de campo. 

Ambos compraron vuelos y se embarcaron en la aventura, pero al llegar allí pensaron que se trataba de un alojamiento que se podía aprovechar mucho más, ya que contaba con doce dormitorios. Les sobraban, nada menos, que diez de ellos. 

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Fue entonces cuando decidieron invitar a otros compañeros de trabajo y amigos a vivir la experiencia, y comenzaron a asentar las bases de lo que ahora es Yon Living. Sin necesidad de dejar de trabajar, comenzaron a realizar distintas excursiones y actividades juntos, a compartir ideas, consiguieron que su creatividad floreciera mucho más, y hasta viajaron de manera temporal juntos a otros lugares como Sicilia, Gran Canaria o Marruecos. 

Siguiendo esta idea de compartir experiencias en enclaves magníficos, decidieron crear varios espacios permanentes en Lisboa, estableciendo su coliving fijo. 

Todas sus casas se encuentran en barrios animados o próximos al centro, con una decoración muy cuidada y espacios amplios. Además, más allá de este espectacular diseño, también organizan rutas de senderismo, clubes de cena mensuales, salidas los viernes y actividades como yoga. Una buena noticia: Yon Living ya apunta su mirada de negocio a otras capitales como Bangkok, Estambul, Atenas o Barcelona.

En Instagram, @yonliving

 

Selina 

Costa Rica, Brasil, Estados Unidos, Panamá o Portugal son solo algunos de los destinos en los que se encuentra Selina. Es uno de los colivings más conocidos por los viajeros, porque tiene de todo: espacios de coworking, diferentes tipologías de habitaciones adaptadas a varios presupuestos con todas las comodidades, mobiliario de primera calidad para garantizar el descanso, un calendario de eventos y actividades que favorece el contacto con otros huéspedes.

Un punto fuerte de Selina es que, más allá de las cocinas compartidas, también ofrece la posibilidad de comer o cenar en sus restoranes, espacios divertidos y modernos que encajan con su filosofía visual y satisfacen paladares con sobresaliente. 

Cada destino Selina es muy diferente. El Selina Amazon Tena, en Ecuador, se sumerge en un ambiente natural impresionante donde domina la vegetación dibujando un paisaje de ensueño; el de Londres Candem permite vivir en el barrio de Amy Winehouse y disfrutar de todos sus mercados de comida callejera en cualquier momento; el Selina Secret Garden está en un oasis de paz escondido, y otros, como el de Theatrou Atenas se levantan sobre construcciones históricas y ofrecen vistas a monumentos y atracciones turísticas tan interesantes como el Partenón. 

Todos los alojamientos Selina, eso sí, cuentan con aventuras locales, regalos y un interiorismo que respira arte. Al estar presente en varios destinos tiene opciones para quienes busquen paisajes verdes, como también para los que amen la costa o los entornos más urbanos y cosmopolitas. 

En Instagram, @selinacolive

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