«El país que queremos” es el lema de la XIX Bienal de Arquitectura, que se realiza desde 1977 en Santiago. Pero hablar de país y pensar en los nuevos desafíos que los arquitectos tendrán que enfrentar en todo Chile sólo desde la capital, parecía una idea extraña. Por eso, este año por primera vez los organizadores se atrevieron a salir de Santiago, llevando la mayor fiesta de la arquitectura al puerto de Valparaíso. “Desde hace un tiempo se ha discutido la necesidad de dar al evento un carácter nacional que trascienda la ciudad de Santiago, donde se han realizado hasta ahora todas las bienales. Valparaíso es una región que alberga prestigiosas escuelas de arquitectura y una activa comunidad de arquitectos”, dice Sebastián Gray, presidente del Colegio de Arquitectos.
La sede será el Parque Cultural de Valparaíso, el centro que se proyectó donde por años estuvo la cárcel; un verdadero icono de la recuperación arquitectónica en nuestro país. Organizada por el Colegio de Arquitectos de Chile, la Asociación de Oficinas de Arquitectos (AOA), la Red de Escuelas de Arquitectura y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes a través del Fondart, la Bienal durará 10 días y reunirá a arquitectos, profesionales del rubro, estudiantes y profesores para analizar lo que han sido los últimos dos años y ver proyecciones a futuro. “Es como la gran fiesta donde hacemos balances de cómo ha sido el desarrollo de la arquitectura en nuestro país”, contó Fernando Marín, director del equipo curatorial de la Bienal, en una entrevista radial.
La muestra estará dividida en dos partes: la académica y la profesional. En la primera van a estar los proyectos que cada Escuela de Arquitectura eligió, además de un workshop universitario y la sección Publicaciones e Investigaciones, donde se van a exponer libros y tesis de magíster y doctorado. En la muestra profesional se podrán ver las 130 obras de arquitectos chilenos elegidas por un jurado; de ellas, 36 serán destacadas, haciendo hincapié en las que incorporan y potencian el espacio urbano.
La otra gran diferencia que tendrá esta versión de la Bienal es que habrá exposiciones satélite en varias ciudades a lo largo de Chile, preparadas con la ayuda de arquitectos y autoridades locales. “Justamente para hablar del país que queremos, primero tenemos que conocer el país que tenemos. En ese sentido es que empezó a nacer el tema de hacerla fuera de Santiago y desde ahí generar todo un despliegue territorial para reconocer el país que tenemos”, contó Marín. Las ciudades elegidas fueron Iquique, Santiago, Concepción, Puerto Montt y Punta Arenas. Ahí se van a instalar containers reacondicionados donde se van a exponer proyectos de arquitectura local interesantes. En Santiago el container satélite estará en la Plaza de Armas, y se podrán ver proyectos de interés regional, muchos de ellos elegidos por la Municipalidad de Santiago. También se podrá ver un mapa de Chile con todos los proyectos destacados a nivel nacional, y algunos de los que forman parte de la exhibición en Valparaíso.
Otra forma de acercarse a la gente será a través de los foros sociales, donde buscan recoger opiniones ciudadanas. “Un llamado concreto es a proponer obras arquitectónicas contemporáneas, lugares, zonas o espacios que serán sometidos a votación popular. Las ganadoras serán incluidas de manera simbólica como parte del Patrimonio del siglo XXII”, explicó Marín. Este documento busca recoger las mejores obras del siglo XXI, y también se puede opinar a través de la cuenta de twitter de la bienal, @bienalarq.
Además de la participación de arquitectos chilenos, habrá un buen mix de invitados internacionales: el holandés Winy Maas, del estudio MVRDV, responsable de obras como el pabellón holandés de la Expo 2000 en Hannover y un plan para crear una eco ciudad en Logroño, España; el colombiano Giancarlo Mazzanti, uno de los arquitectos más reconocidos de su país, que proyectó la Biblioteca España en Medellín, ganadora de la Bienal Iberoamericana de Arquitectura y parte de la colección del MoMA; y Kap Malik, socio principal del estudio Gensler, y arquitecto de la Torre de Shanghai, el segundo edificio más alto del mundo, que se inaugurará muy pronto, entre otros.
Para terminar esta gran fiesta como corresponde, se entregará el Premio Nacional de Arquitectura 2014 al arquitecto y paisajista Teodoro Fernández, quien dará una charla y contará con un pabellón propio para exponer los proyectos que han marcado su carrera.
El Parque Cultural de Valparaíso, que se levantó donde antes estaba la cárcel de la ciudad, será la sede de esta nueva versión de la Bienal.
La Bienal se realizará entre el 16 y el 26 de abril y terminará con la entrega del Premio Nacional de Arquitectura 2014 a Teodoro Fernández.
